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Al hacer un balance de los controles que realiza la corporación para disminuir la contaminación del aire, William Gómez, coordinador del Área Metropolitana de la subdirección de Evaluación y Control, señaló que: “actualmente se hacen seguimientos a las fuentes móviles, es decir automóviles, y a las empresas que desarrollan actividades que generan descargas al aire. Se realizan visitas constantes para comprobar que las emisiones de contaminantes se ajusten a las normas nacionales”.
El grupo de Fuentes Móviles se encarga de los operativos en los 13 municipios de la jurisdicción, para determinar si los vehículos están superando los límites permitidos de dióxido de carbono, monóxido de carbono y ozono troposférico, entre otras sustancias. Los conductores son requeridos para que hagan los ajustes a la sincronización, y puedan así circular por la región.
La entidad destina además un grupo de profesionales para el seguimiento a industrias, en cuanto al manejo de emisiones atmosféricas. Los ingenieros visitan y evalúan las condiciones de ladrilleras, harineras, arroceras y empresas metalmecánicas, con el fin de exigir el trámite del permiso de emisiones, que establece condiciones técnicas para reducir el impacto ambiental. En el caso de las industrias se hacen mediciones del material particulado, el dióxido de azufre y el óxido de nitrógeno.
El funcionario recordó a los industriales, en el Día del Aire Puro, que deben ajustarse a los protocolos de control y vigilancia para la contaminación atmosférica, con el ánimo de evitar sanciones, y contribuir con un medio ambiente saludable.
El control que ejerce la autoridad ambiental es fundamental, debido a que las sustancias que salen a la atmósfera pueden generar graves problemas para la salud humana, como enfermedades respiratorias, cardiovasculares y cáncer.