Quince árboles, 14 de la especie caracolí y un nauno, fueron talados en Piedecuesta para dar paso a una construcción habitacional (Portanova).
Ante la denuncia presentada a la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, de una tala de árboles en un predio en el municipio de Piedecuesta, el Grupo Élite Ambiental, GEA, y el Grupo de Fauna y Flora acudieron para verificar la documentación y permisos correspondientes.
Allí encontraron que según la resolución 110 del 25 de febrero de 2015, el Área Metropolitana de Bucaramanga, autorizó a la firma de constructores Inacar para talar estos árboles que superan el metro de altura, aseguró Pedro Miguel Cacua Sánchez, coordinador del GEA.
“La situación es preocupante por el daño al ecosistema además el Caracolí es una especie catalogada como vulnerable, con alta significancia ambiental sobre todo en el Valle de Guatiguará”, manifestó Cacua Sánchez.
A su vez agregó “la CDMB no se hace responsable de los daños hechos a la naturaleza, ya que en los últimos 50 años el trabajo ha sido defender el medio ambiente del desarrollo urbanístico que se genera en Bucaramanga y el área metropolitana”.
La Corporación aclara que desde hace varios meses no otorga esta clase de permiso de tala de árboles.