Las aves fueron recuperadas por técnicos de la CDMB, que fueron llamados de forma anónima por la ciudadanía que ya entiende que las loras no deben estar en los hogares.
La coordinación de Flora y fauna acudió a los barrios Bucarica y Diamante II donde habitantes tenían como mascotas a cada una de las loras frentiazul, una especie amenazada de la fauna colombiana.
“Encontramos maltrato por corte de plumas, al llegar le indicamos al tenedor la importancia de entregar estos animales a la CDMB para ser recuperados”, indicó Carlos Omar Ramírez, zootecnista de la CDMB.
Las aves entrarán a cuarentena para alimentarlas de forma adecuada en el Centro de Fauna en la vereda Helechales de Floridablanca, donde se les suministrará vitaminas para la reposición de sus plumas que crecerán en más o menos un año.