El arrayán es una de las especies más importante que cubrieron los bosques y están cubriendo las sabanas del sector de Cachirí y Turbay de Suratá, sector oriental de Tona, Charta y Matanza.
Esta especie se caracteriza por su porte bajo (un dosel de aproximadamente de 15 metros) y está siendo talada para el establecimiento de potreros para ganadería extensiva.
Cuando los arrayanes están en temporada de floración, suelen llegar enjambres de abejas (apis mellifera) que las liban y las polinizan. este árbol cuenta con grandes propiedades curativas.
Este fue justamente el árbol que plantó Antonio Nariño como símbolo de la libertad, el 29 de abril de 1813.
La tradición de plantar árboles fue heredada de la Revolución Francesa, es decir de una revolución de la cual se esperaba morder un delicioso fruto: la libertad. Sembrando un árbol en la plaza mayor, Nariño demostraba su cercanía con los ideales de aquella Revolución, que tanto asustaron a la aristocracia y que en América contribuyeron a poner en entredicho el poder de España en las colonias.