El funcionario aprovechó para hacer un llamado a las constructoras con el ánimo de buscar alternativas diferentes a la tala: “muchas constructoras hacen sus diseños sobre desiertos, no miran el componente arbóreo, hacen diseños como si no existiese ningún árbol plantado. Es un llamado a las constructoras para que miren este componente, y busquen antes de talar, incorporar los árboles a sus proyectos”.
Dentro de los parámetros que se tienen en cuenta a la hora de autorizar la tala de árboles para dar paso a obras, están el tipo de especie que se encuentra sembrado, y el impacto sobre taludes.
Nuevas Alternativas de Compensación
Para disminuir el impacto ambiental que conlleva la tala, la Subdirección de Evaluación y Control plantea nuevas opciones para las empresas constructoras:
-Buscar la reubicación de los árboles, tal y como se hace en los Estados Unidos.
-La compra de predios en áreas protegidas por parte de los constructores, con fines de conservación.
-Habilitar lotes dentro del municipio para generar “parches verdes”.
-Reforestar las áreas cercanas a las fuentes hídricas que pasan por el municipio.
Control a Grandes Obras
De otro lado la CDMB, está realizando un seguimiento desde lo ambiental, a grandes proyectos de construcción, como los centros comerciales.
En las últimas horas se realizó una visita a las obras que se adelantan en la autopista entre Floridablanca y Bucaramanga. Un centro comercial, que reunirá locales y un hotel. En estos casos la autoridad ambiental, ante peticiones de la comunidad, hace recomendaciones, en cuanto al manejo de vertimientos de agua, ruido, emisiones de material particulado, y los protocolos para la disposición de los residuos generados por el movimiento de tierra.
La CDMB exaltó el trabajo de la interventoría ambiental, que tiene la obra, y solicitó medidas para controlar la expulsión de material particulado hacía una zona de tránsito peatonal ubicada sobre la autopista.